Apolo - 13 de diciembre de 2005Lo de Turbonegro no lo entiendo. Hay grupos que mejoran en directo y a la inversa, hay grupos que mejoran en estudio. He visto a gente con discos que no me gustan dar conciertos estelares y a peña con grandes trabajos dar actuaciones lamentables, pero nunca la diferencia me ha parecido tan grande como con Turbonegro. Estos tíos tienen una de mis discografías preferidas, con un "Apocalypse Dudes" que merece estar entre los mejores discos de rock, y un directo de pena.
Los vi a finales del '98 y el concierto fue horrible. Al mes siguiente se separaron. Se dijo que el tour les dejó para el arrastre, y eso sirvió en parte para justificar ese y quizás algún otro concierto para el olvido. En el '02 volvieron en forma, según dicen, y durante el pasado Festimad los vi de nuevo. Esta vez me gustaron, sin llegar a volverme loco y en medio del ambiente que proporciona un festival así tras varios teloneros de lujo, pero me gustaron. Pensé entonces que estos Turbonegro podrían mejorar bastante en una sala pequeña, y no dudé demasiado en ir a la actuación del Apolo.
No sé, quizás hubiera visto el conciertazo que esperaba si los cabrones no se hubieran metido tanta mierda. Porque cierto es que durante los primeros veinte minutos me lo pasé bastante bien, pero la cosa fue a menos hasta caer a niveles bastante chungos. El líder de los despropósitos era un Päl Pot Pamparius absolutamente incapaz de tocar algo coherente, su presencia en el escenario estaba de más ya que lo único que hacía era tambalearse y poner caras amaneradas. Euroboy le seguía de cerca, aunque el cabrón es tan bueno que aún así es capaz de tocar algo, Happy Tom parecía incapaz de moverse y cuando se dirigió al público sólo fue capaz de pronunciar "españoles borrachos" o algo similar y Hank Von Helvete, que se pasó medio show utilizando el pie de micro para apoyarse, llegó a decir una cantidad incontable de tonterías por segundo y sólo pareció tener cabeza y conseguir que alguien le prestara un poco de atención cuando sorprendió hablando de Durruti.
Más de medio concierto fue una ruina, es una lástima verlos así.
astro-man
