Sidecar - 16 de abril de 2005

¡Tercera vez que veo a The Rippers en menos de año y medio!

Abrieron Fujiyama Kids, de Mollet del Vallès, la banda más gamberra que he visto. Con un sonido horrible lograron una actuación divertidísima gracias sobretodo a su actitud totalmente desenfadada. El cantante, que parecía llevar una buena borrachera, no paraba de decir cosas sin sentido, casi me da con el pie de micro en un par de ocasiones y tuve que decirle tres veces que no me tirara la birra que me pidió para darle un trago, ya que ya había malgastado una cerveza entera que tiró al suelo y medio cubata que se le derramó en la camiseta al ir a beber.

No pararon de moverse durante todo el concierto y como el escenario muy grande no es, se tropezaban entre ellos y con los micros. Tuve que colocar un par de micros sobre el escenario y en una ocasión uno de los guitarras se dio un buen golpe en la cabeza contra el suelo. Quería hacer una cuenta de protección para hacer la bromita tonta pero vi que le había dolido.

Punk directo, muy sucio y totalmente desenfadado. Se lo pasan bien los cabrones.


The Rippers continuaron con los problemas de sonido y tras la segunda canción decidieron parar y perder unos minutos en arreglar el asunto.

Lo solucionaron bastante bien y siguieron con un concierto muy directo y con su repertorio más agresivo. Sonaron algo más metálicos que en su actuación en el Magic y no cabe decir que el ambiente de la sala aunque tampoco fue espectacular si fue algo mejor (cosa no muy difícil). Yo creo que la dureza del sonido dejó algo shockeada a la peña, que apenas aplaudía entre canción y canción.

Los de l'Arboç fueron muy directos. Habían pactado con Basque Country Pharaons, quienes tocaban esa misma noche en el Magic, acabar a media noche para que la peña llegara a tiempo a la sala del Born para ver el show de los pamplonicas, así que no perdieron el tiempo entre las canciones.

astro-man